Puesta en marcha de la Calefacción.

Sin darnos cuenta ya ha llegado el frío. Así que, es el momento de hacer la puesta en marcha de la calefacción porque en cualquier momento vamos a querer encenderla y antes de hacerlo, conviene comprobar que la presión de la caldera es la correcta.

Una presión entre 1 y 1,5 bar hará que todo marche bien.

Barometro-Caldera

La presión hay que mirarla cuando la calefacción está apagada, ya que una vez encendida, el agua se calienta y la presión sube.

Si por lo que fuera la presión fuese baja, hay que meterle agua, normalmente tienen una llave pequeña en la parte baja de la caldera (mira en las instrucciones de la caldera para saber exactamente cuál es). Lo mejor es abrir esta llave poco a poco, oír el correr del agua y fijarnos en el reloj que marca la presión, para cerrarla cuando se llegue a la presión óptima. Si la abrimos rápido y del  todo, nos puede entrar demasiada agua.

Si nos hemos pasado al llenarla o si por lo que fuera la caldera tiene demasiada presión, podemos reducirla sacando agua de los radiadores, es decir, purgándolos. Podemos ir sacando vasito a vasito y comprobando la presión a cada poco. Hasta dejarla sobre los 1,5 bar.

¡Y ya podemos ponerla en marcha con toda tranquilidad!

Eso si, si una vez puesta la calefacción vemos que algún radiador no calienta seguramente tendremos que purgarlo. Puedes leer este otro manual sobre el purgado de los radiadores que hemos escrito pinchando AQUÍ.

Si tienes dudas o no consigues que funcione bien, llámanos y le buscaremos solución.